El Cuarteto de Nos en Rosario: rap rock del Río de La Plata a orillas del Paraná

La banda que aún ostenta haber hecho el disco más vendido del rock uruguayo (“Otra navidad en las trincheras”, el segundo de toda la historia de la música del país vecino) abarrotó La Sala de las Artes, en una noche dominical y reflexiva, ideal para disfrutar la de la prosa de este grupo latinoamericano que tocó en la esquina de Suipacha y Güemes, el pasado 8 de mayo. 




En el mismo sitio, pero casi tres años después de su última pasada por la ciudad. Allá por 2019 presentaban su disco “Jueves” y en 2022, un domingo, tickets agotados para el exitoso marco que significaba regresar a las tablas de Pichincha con un puñado de clásicos y algunas sorpresas para lo que será un álbum nuevo a publicarse a mitad de año. 


Eran las 19 cuando por las calles de ese mítico barrio rosarino ya se preparaba el público para entrar mientras afuera, uno de los carritos linderos literalmente estaba haciendo un asado para comer algo antes o después del concierto. Sorteando la tentación del aroma a parrilla, a eso de las 20 no cabía un alma en el interior. Fueron apenas 20 minutos, pasadas las ocho de la noche, que este cuarteto (por momentos quinteto) inauguró con canciones un muy esperado regreso a la ciudad.


Las preguntas existenciales y el cuestionamiento de esta banda considerada casi icónicamente como abanderada del rock cómico comenzaron sin mediar palabra. Fueron “Punta Cana”, los riffs de “El hijo de Hernández”, los rasgos folclóricos rioplatenses de “Ya no sé qué hacer conmigo”, y el rap de “Lo malo de ser bueno”, las que mediaron hasta que el cantante y guitarrista Roberto Musso (en noviembre cumplirá 60 años) salude a la afición y les recuerde que en mayo se festejan 15 años del lanzamiento de “Raro”. Para la celebración simbólica sonó: “Hoy estoy raro”.


Pese a los años de faltazo, la química del grupo con la gente del lugar se mantuvo intacta (fue sold out inmediato) durante el trascurso de la noche. Cantaron todas las canciones, incluso las que todavía no están en ningún álbum y sí en plataformas virtuales como adelanto de uno nuevo que se vendrá en breve. Y entre corazones mame32 en la pantalla de atrás, el bajista Santiago Tavella abandonó las cuatro cuerdas por un momento para cantar la cumbia irónica “Enamorado tuyo” y reanudar ese rap rock del Río de La Plata con “Mi lista negra”.



Musso aprovechó para dar la primicia de que el próximo disco saldrá antes de fin de año y “para que descansen un poco los oídos” presentó “La ciudad sin alma”, una de las nuevas que estará presente en esa placa de estudios venidera, el segundo corte tras la publicación de “Fiesta en lo del Dr. Hermes”, que igualmente sonó en Rosario, aunque un rato después.


Con ritmos de cumbia punk fue el momento de “Mario Neta”. “Dale Mario Neta, son las 7, levantate”, gritaban todxs en la sala como protestándole al domingo, previo a madrugar un lunes. El vocalista terminó desplomado en el piso, fingiendo a sus casi seis décadas estar extenuado. Para “Contrapunto para humano y computadora”, el cantante descolló con otra performance impecable en esta canción también de “Jueves”. En la pantalla, a lo Carmen Sandiego, se armó ese picante debate con la PC y en el final pudo apreciarse como el montevideano balbuceó “la puta que te parió, la concha de tu madre”.


En ocasiones el cuarteto es un quinteto desde que el tecladista Santi Marrero (sobrino de Roberto Musso) se unió en 2009. El además productor y bajista participó activamente de uno de los estrenos (“Fiesta en lo del Dr. Hermes”) y luego irrumpieron en la lista “No llora”, el hip hop “Hombre con alas” (otra de las tantas que tocaron de “Jueves”, 2019), para desmitificar todas las leyendas y contar la verdadera historia de la formación, usufructuando el momento de la anécdota para presentar a los otros cuatro compañeros de proyecto. Sin espacios para moverse, y los de más atrás en puntitas de pies para no perderse ningún detalle, se hizo uso del “Gaucho power” y una canción de amor especial con “Me amo”.

“Para los que llegaron tarde o los trajeron engañados, somos El Cuarteto de Nos” se despidió Musso después del rockero “Invierno del ‘92”, aunque nadie se movió y desde el público se agitaba para una más con la letra de “Yendo a la casa de Damián”, cantada a capella. Marrero, Musso, Santiago Tavella, Álvaro Pintos y Gustavo Antuña no se hicieron rogar demasiado y retornaron al escenario de La Sala para irse ya definitivamente con “Llegó papá” y ese hit inoxidable, nominado al Grammy Latino en 2007, que fue la previa a una clausura con sonidos electrónicos.


Con la premisa en la antesala de que iba a ser “Un jueves raro”, las entradas para el 8 de mayo volaron en todas sus versiones dsiponibles. El Cuarteto de Nos (fotos: @mpinkph) arribó a Rosario con un repaso de sus éxitos y los adelantos del próximo trabajo discográfico. Vuelta al ruedo tras el impasse de shows que trajo aparejada la pandemia, con el 15 aniversario de “Raro” como emblema (se editó un vinilo para homenajearlo), además de que en 2021 grabaron en Montevideo esas dos nuevas canciones, junto a Eduardo Cabra (Visitante de Calle 13). Pero este 2022 también estrenaron su propio sello discográfico, Porfiado Records, todo un logro para este proyecto formado en los ’80 que no detuvo su marcha pese a los achaques de estos tiempos y va por muchos más para mantenerse vigentes.





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